Exigimos al gobierno provincial que cese los intentos de criminalizar y demonizar a las organizaciones que se ocupan de tender y sostener puentes solidarios a quienes cotidianamente se les vulneran sus derechos.
En tiempos de fuerte crisis social, estigmatizar e inhabilitar la solidaridad de clase es, cuanto menos, una muestra del desprecio y desinterés de la clase política por proteger a quienes más padecen la critica situación en la que nos puso el poder económico
Toda nuestra solidaridad y acompañamiento a nuestrxs compañerxs.
𝗘𝘅𝗶𝗴𝗶𝗺𝗼𝘀 𝘀𝘂 𝗹𝗶𝗯𝗲𝗿𝘁𝗮𝗱 𝗶𝗻𝗺𝗲𝗱𝗶𝗮𝘁𝗮